El equipo científico afirma haber “desactivado” el gen CCR5 y adelantó que el próximo mes “se darán a conocer más detalles sobre la investigación”.
Un equipo de científicos de la Universidad de Shenzhen, China, asegura haber creado los primeros bebés manipulados genéticamente con el objetivo de hacerlos “resistentes a enfermedades”, de acuerdo con la publicación MIT Technology Review, aunque la prensa local sostiene que aún falta “constancia” de ese estudio.
El científico que lideró la investigación, He Jiankui, reveló el proceso de fertilización que siguió hasta lograr el nacimiento este mes de las gemelas Lulu y Nana, “genéticamente modificadas”.
“Los resultados indicaron que la operación funcionó correctamente, como estaba previsto”, aseguró el investigador en un video publicado en Youtube, y agregó que las bebés “tienen sus genes modificados para que no puedan contraer el VIH”.
Según He, la modificación no busca eliminar enfermedades genéticas, sino “dar a las niñas la habilidad natural para resistir a una posible futura infección al VIH”.
Para cumplir con su objetivo, el equipo científico “desactivó” el gen CCR5, lo que en la práctica se trataría de una “mejora del ADN”, explicó He, y adelantó que el próximo mes “se darán a conocer más detalles sobre la investigación”.
Si bien la revista especializada del MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts) publicó la investigación, el diario local China Daily señaló que la universidad a la cual pertenecen los científicos “no tiene constancia del estudio”, y añadió que las autoridades sanitarias de Shenzhen “no recibieron ninguna solicitud” para llevarlo a cabo.
Asimismo, el periódico sostuvo que la investigación “desató controversias” entre los académicos y los ciudadanos del país “por su ética y su efectividad”.
Especialistas en bioética coincidieron en que es “absolutamente cuestionable” por “no ética” la creación de dos bebés modificadas genéticamente para hacerlas resistentes al VIH.
“Esta experimentación con seres humanos es absolutamente cuestionable éticamente, en primer lugar porque la finalidad de la investigación es generar conocimiento, pero centrándose siempre en la persona humana y su protección, porque de lo contrario vamos a terminar como en (los campos de concentración nazis de) Nuremberg”, aseguró a Télam Graciela Moya, investigadora del Instituto de Bioética de la UCA.
Esta doctora en biomedicina y especialista en génetica recordó que la bioética prescribe que “es la ciencia la que está al servicio de la persona y no al revés”.
“En este caso, al no haber cumplido todos los pasos que requiere la introducción de la técnica de edición del genoma de Crispr-Cas en embriones e implantarlos luego cuando no está completamente confirmado que no produzca daño, la persona es un medio para el avance científico”, agregó.