Participó de una fiesta clandestina con varios jugadores de Vélez, que ya declararon como testigos.
La Justicia ordenó la captura nacional e internacional del entrenador de fútbol Juan José Acuña, acusado de haber abusado sexualmete de una mujer durante una fiesta clandestina en un country de San Isidro.
El hecho ocurrió en una reunión privada organizada por el futbolista de Vélez Juan Martín Lucero en una casa alquilada del barrio privado “Camino Real”.
Del encuentro también participaron los jugadores Ricardo Centurión, Thiago Almada y Miguel Brizuela, quienes quedaron desvinculados de la causa aunque este sábado se aprestaban a tomarles declaración como testigos.
El testimonio de una amiga de la víctima indicó que Acuña salió de una habitación acomodándose los pantalones, mientras que adentro del cuarto se encontraba la joven de 28 años, que había quedado inconsciente.
En el marco de la investigación, la Policía bonaerense allanó el domicilio del acusado en Quilmes pero no lo encontraron ya que su esposa lo echó al enterarse de la denuncia, por lo que fue declarado prófugo de la Justicia.
En esa casa, donde también estaba el hijo del acusado, los efectivos secuestraron ropa, cuatro celulares y un auto Chevrolet Onix.
Además se realizó otro allanamiento en un domicilio del partido de Tres de Febrero en el que detuvieron a dos mujeres acusadas de robarle el celular y la billetera a la víctima mientras estaba inconsciente.
Allí se encontraron pertenencias de la joven y también secuestraron los celulares de las acusadas.
El denunciado, de 42 años, dirigió la reserva de Defensa y Justicia, donde conoció a Lucero, y después de su paso por el Halcón fue técnico de Argentino de Quilmes, donde asumió a mediados de 2016 y se sostuvo en el cargo durante más de un año.