Varios miles de manifestantes protestaron por los planes de recorte del gasto público. E increparon a los legisladores, varios de los cuales llegaron en helicópteros a la sesión.

Unos veinte heridos es el saldo de los enfrentamientos protagonizados hoy (miércoles 15) en Barcelona por la policía y varios miles de manifestantes que bloquearon el acceso al Parlamento.

Los “indignados” bloquearon el parlamento regional de Cataluña, en Barcelona, en protesta por los planes de recorte del gasto público en sanidad y educación decididos, y obligaron a varios legisladores a utilizar helicópteros para ingresar al edificio.

Se vivieron entonces varios minutos de tensión cuando los parlamentarios llegaban a pie al parque de la Ciutadella, en el centro de la ciudad.

El presidente del gobierno catalán, Artur Mas, fue uno de los dirigentes que debió usar un helicóptero para acceder a la sede legislativa, en la que se debate un presupuesto muy restrictivo para combatir la crisis de deuda que sacude a este región del noreste de España.

En total, unos 400 policías se apostaron en la zona para impedir que los manifestantes pudieran irrumpir en el Parlamento. Los agentes cargaron contra los manifestantes, concentrados en los alrededores del parque, para permitir que los diputados entraran al edificio y ocuparan sus escaños.

Los enfrentamientos, al menos por ahora, concluyeron con una veintena de heridos.

La protesta es parte de lo que ya se conoce como la “Revolución de los indignados” o “Movimiento 15-M”. Se trata de miles de personas, en su mayoría jóvenes, que desde hace un mes muestran en las calles su descontento con la clase política en general, el desempleo, los bancos y la salida que se está dando a la crisis económica.

La mayoría de las protestas han sido pacíficas, pero los incidentes de Barcelona y el acoso al que se vieron sometidos los legisladores provocaron una ola de críticas en todo el país. “Se han traspasado las líneas rojas”, dijo Mas.

“Admito la protesta de dos mil personas, pero les quiero recordar a estos dos mil que ha habido 3,2 millones ciudadanos que han votado a esos representantes que han sido agredidos”, dijo el legislador Ramón Jáuregui.

En total, 36 personas debieron ser atendidas por los servicios de emergencia, doce de ellos policías. Todas ellas presentan heridas leves.

Para Mas, estos incidentes son responsabilidad de “grupos relativamente reducidos” que han creado una situación “excepcional”. “Da pena, es triste y se debe combatir”, dijo ante las cámaras de TV.

En tanto, el rechazo de los partidos a los incidentes producidos por los Indignados en los alrededores de la cámara catalana es unánime. Todos los grupos parlamentarios han consensuado un documento en el que rechazan la “coacción” sufrida por “diputados, trabajadores del Parlament y medios de comunicación”.

“Nada ni nadie podrá frenar el trabajo de un parlamento democrático”, reza el documento consensuado por todos los grupos que leyó la presidenta de la cámara, Núria de Gispert.