El titular de la Corte Suprema reclamó a los magistrados que sean “íntegros” y que expliquen “sus decisiones a la luz de sus mismos principios” porque “los jueces cambiantes socavan la Justicia”.
El presidente de la Corte Suprema, Carlos Rosenkrantz, afirmó hoy que los jueces son “muy poderosos” y que por eso deben “entender” el poder que se les “confía”.
El titular del máximo tribunal disertó hoy en el ciclo “Cómo pienso a la Argentina” organizado por el Rotary Club.
Consultado sobre las diferencias surgidas en los últimos fallos de la Corte, que no han salido por unanimidad de sus cinco miembros, Rosenkrantz enfatizó que “no hay conflictos internos” sino que “es un organismo que tiene cinco ministros que muchas veces tienen visiones diferentes acerca de lo que debe hacerse”.
“Defendemos nuestras ideas con bastante convicción y vehemencia. Me parece que el país se tiene que acostumbrar a que gente que tiene buena fe y comparte propósitos institucionales muchas veces está en desacuerdo, que son desacuerdos que se expresan en modos diferentes pero no son más que eso”, suavizó el tema.
El magistrado admitió que “la Justicia tiene baja reputación” pero atribuyó ese fenómeno a “la opinión moldeada por los medios de comunicación que adjudican buena parte de nuestros males al proceso judicial”, a contramano de las creencias de quienes hacen uso del sistema judicial que, según esos mismos números, tiene mejor apreciación.
“Cuando se le pregunta a usuarios del sistema judicial cuál es su reputación la respuesta es positiva en alrededor del 45%. Buena parte es producto de convicciones que tiene gente que no ha sido usuaria”, planteó.
Rosenkrantz fue consultado sobre la posibilidad de que los jueces comiencen a pagar Impuesto a las Gananicas. “La pregunta correcta es qué jueces queremos y cuánto tenemos que pagar a los jueces que queremos”, respondió. “Los jueces somos muy poderosos, los únicos elegidos de por vida, debemos entender el poder que se nos confía”, agregó.
En ese sentido, reclamó a los magistrados que sean “íntegros” y que expliquen “sus decisiones a la luz de sus mismos principios” porque “los jueces cambiantes socavan la Justicia”.
“Debemos ser independientes no solo de los otros poderosos del Estado, sino también de nuestras convicciones ideológicas y políticas”, manifestó. “Deben ser valientes y tener la valentía de decir lo que el derecho exige, independientemente de lo que pida la tribuna”, sugirió a los magistrados.