El trasfondo del escándalo en Milán es la renovación del contrato del goleador con el club “neroazzurro”.

La renovación del contrato del delantero argentino Mauro Icardi con el Inter de Milán cumplió su promesa y pasó de convertirse en la novela de Año Nuevo del fútbol italiano a la novela de la temporada, y para el club “neroazzurro”, el papel de villana le calza perfecto a la esposa y representante del goleador: Wanda Nara.

El último capítulo de la historia es negativo para el futbolista: a través de un comunicado, el club anunció que le va a quitar la cinta de capitán al delantero y se la dará al arquero esloveno Samir Handanovic.

La drástica decisión contra el rosarino se dio al día siguiente de que Wanda Nara, en su rol de panelista en un programa de fútbol, criticara al director técnico del Inter, Luciano Spaletti.

“¿Por qué Icardi no marca? Siempre ha hecho goles. Lautaro ha marcado gracias a un gran movimiento de Mauro, que estuvo poco acompañado en este período”, analizó Wanda en el programa “Tiki taka” de Sport Mediaset.

“A lo mejor Spalletti debía meter antes a Lautaro. Spalletti se aprovecha de que Mauro y Lautaro son amigos y entre ellos no hay rivalidad”, se metió la blonda a opinar sobre el trabajo del DT.

La situación tensó al máximo la relación entre la dirigencia y la esposa de Icardi, ya que desde el club no quieren a Wanda como representante del goleador, que la banca sin importar lo que le digan.

Los problemas arrancaron en la segunda mitad del año pasado, cuando los dirigentes comenzaron a buscar la renovación del contrato de Icardi, pero Wanda dilató las negociaciones porque, según ella, en el último mercado de pases el goleador había rechazado ofertas de la Juventus y los sondeos del Real Madrid para quedarse a jugar la Champions League con el equipo de Milán.

En diciembre, la mediática avisó a través de un tuit por la madrugada que estaba “leyendo las renovación” de Icardi. Y esa filtración no le gustó a la dirigencia del club.

Primero fue el directivo Piero Ausilio, quien afirmó que a no le gustaba “hacer tanto teatro en las redes sociales”. Además sostuvo que el club ya presentó una oferta hacía dos meses y que “Mauro no la aceptó”.

Luego, el que explotó fue el prócer argentino en el Inter, Javier “Pupi” Zanetti, que es vicepresidente del club. “Es una cuestión de respeto, todos deben respetar sus roles”, sostuvo el exfutbolista en diálogo con Radio Deejay al ser consultado sobre las declaraciones de Wanda.

En ese momento nos preguntábamos si habría Felices Fiestas. Sin la cinta de capitán en el brazo izquierdo de Icardi, nadie se anima a preguntar por las Pascuas próximas…