Boca alcanzó este jueves su duodécima final de Copa Libertadores al vencer por penales a Palmeiras en el Allianz Arena, de San Pablo, por 4 a 2, luego de igualar 1 a 1 en los 90 minutos tras la paridad sin goles de la ida en la Bombonera, con los dos primeros disparos de los brasileños contenidos por Sergio Romero.
La ansiada séptima Copa Libertadores está ahora a 90 minutos, que se disputarán el 4 de noviembre próximo en el partido decisivo ante el también brasileño Fluminense en el estadio Maracaná, de Río de Janeiro.
El uruguayo Edinson Cavani abrió el marcador para el “Xeneize” a los 23 minutos del primer tiempo mientras que Joaquín Piquerez empató a los 28 de la segunda etapa, cuando ya había sido expulsado el defensor de Boca Marcos Rojo.
Con un jugador menos, surgió la gigantesca figura del arquero del equipo de la ribera, Sergio “Chiquito” Romero, que tapó pelotas fundamentales para poder llegar a la tanda de penales, donde atajó dos para hacer olvidar el que falló Cavani en el primer disparo y desatar la fiesta azul y oro.