El Congreso de Chile extendió por 15 días el estado de emergencia que rige en la región de La Araucanía y en dos provincias del Biobío, ambas en el sur del país, por la violencia desatada a raíz del conflicto mapuche.
Aunque el presidente trasandino, el izquierdista Gabriel Boric, había asumido con la promesa de no prorrogar el estado de emergencia que había decretado su antecesor, el derechista Sebastián Piñera, la quema de camiones, ataques a propiedades y cortes de ruta hicieron que el Gobierno decidiera continuar con la medida de excepción.
Al justificar ante los diputados la solicitud del gobierno, la ministra del Interior, Izkia Siches, aseguró que con el estado de emergencia disminuyeron en un 41% la quema de camiones y en un 74% los atentados incendiarios a viviendas, las principales consecuencias violentas del conflicto mapuche.
Esta semana encapuchados quemaron 19 camiones y maquinarias en dos ataques a predios forestales del Biobío, según informó a la prensa el comandante policial Eduardo Rosales. En el lugar la policía encontró un lienzo en el que la organización mapuche Weichan Auka Mapu se atribuyó el atentado.