“El presidente (Joe Biden) tiene la intención de postularse en 2024”, confirmó la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, en momentos en que la desaprobación ronda el 60%, entre otros motivos por la inflación histórica que sufre la primera potencia mundial.
Quizás para evitar ya el “síndrome del pato rengo” que afecta a los mandatarios después del segundo año de su segundo mandato, Biden, hoy de 79 años, dejó trascender que intentará buscar un nuevo período: si lo hace, a punto de cumplir 82 años, sería el más anciano en intentarlo.
“El presidente tiene la intención de postularse en 2024. Estamos muy lejos de eso. No puedo entrar en detalles de ninguna encuesta electoral porque estoy detrás de este podio”, dijo Jean-Pierre en una sesión informativa al preguntársele sobre las encuestas que muestran la baja popularidad entre los propios demócratas, que de persistir derrumbarían las chances de Biden.
El 61% de los consultados para un sondeo realizado por NewsNation-Decision Desk HQ afirmó que prefiere que el actual presidente no vaya por la reelección. Tampoco los números favorecen mucho a la vice, Kamala Harris.
La mayor inflación en cuatro décadas se desató durante la pandemia de coronavirus y recrudeció en los cinco meses que lleva la guerra entre Rusia y Ucrania, hasta trepar al 9,1% anual, lo que generó a su vez una suba también sin precedentes en las tasas de interés, que ascendió al 1,5%.
“Tercera vía” en EEUU: exrepublicanos y demócratas forman un nuevo partido
Mientras el gobierno asegura que la nación no está aún en recesión, los analistas consideran que se cumple al estándar de dos trimestres consecutivos con crecimiento negativo. En el segundo terminado el 30 de junio el PIB cayó 0,9%.
Biden, de 79 años, acaba de superar airosamente un cuadro de Covid-19 y volvería a enfrentarse con el magnate republicano Donald Trump en los cruciales comicios del 5 de noviembre de 2024, quince días antes de que cumpla 82.
En las últimas elecciones generales, Biden superó a Trump por una ventaja mínima, lo que llevó al expresidente ultraderechista a denunciar, incluso aún hoy, que hubo de fraude, aunque sin aportar nunca pruebas concretas.
Este jueves fue presentado un tercer partido político, “Forward” (“Adelante”, en español) para romper el bipartidismo entre demócratas y republicanos, y ofrecer una alternativa a la grieta radicalizada que mantiene paralizada a la dirigencia.