Rusia está dispuesta a considerar las propuestas de Ucrania que tienen en cuenta la posición rusa, declaró a Sputnik en una entrevista el representante permanente de Moscú en la ONU, Vasili Nebenzia.

“Nuestra posición sobre las negociaciones con Ucrania es bien conocida y no ha cambiado. Seguimos dispuestos a examinar propuestas serias que tengan en cuenta nuestra posición y la situación actual en el mundo”, dijo Nebenzia.

Subrayó que por el momento Rusia no ve el interés de Ucrania en las negociaciones. Nebenzia recordó que el 30 de septiembre de 2022, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, firmó un decreto que prohíbe las negociaciones con el Gobierno ruso.

“Pero lo que es más importante, incluso si Kiev quisiera [negociar], los patrocinadores occidentales no lo permitirían. Son ellos quienes están haciendo una guerra subsidiaria con nosotros”, agregó.

Rusia continúa desde el pasado 24 de febrero una operación militar especial en Ucrania alegando que las repúblicas de Donetsk y Lugansk —inicialmente reconocidas por Moscú como Estados soberanos y, en septiembre pasado incorporadas al territorio ruso tras sendos referendos— necesitaban ayuda frente al genocidio por parte de Kiev.

El pacto alimentario. Se redujo del 4 al 3% el volumen de granos que reciben los países más necesitados en el marco del “acuerdo alimentario” firmado el 22 de julio de 2022, comentó Nebenzia a Sputnik.

A juicio del diplomático, la iniciativa de exportación de granos ucranianos se transformó de humanitaria en una puramente comercial. Según sus datos, hasta el 6 de febrero de tres puertos del mar Negro –Odesa, Chernomorsk y Yuzhni– salieron libremente barcos con más de 20 millones de toneladas de víveres.

“El cuadro de la geografía real de los destinatarios es el siguiente: los países con alto nivel de ingresos [UE, el Reino Unido y otros] recibieron 8,6 millones de toneladas [47%]; los de ingresos superiores a los medianos [China, Jordania, Malasia, etc.], 6,1 millones de toneladas [33%]; los que están por debajo del nivel medio [Bangladés, India, Pakistán, etc.], 2,9 millones de toneladas [16%]”, remarcó.

“A los países auténticamente necesitados [Somalia, Etiopía, Yemen, Sudán, Afganistán y Yibuti] se enviaron solo 551.527 toneladas [3%], incluidas 396.169 toneladas [2%], en barcos fletados por el Programa Mundial de Alimentos de la ONU”, subrayó.

Según Nebenzia, en la estadística general disminuye la parte correspondiente a estos últimos países. “En los primeros 120 días de la vigencia de la iniciativa alimentaria, les correspondía casi el 4%, y ahora disminuyó hasta el 3%“, constató.

Además, el funcionario indicó que sería prematuro debatir la extensión de la Iniciativa de granos del mar Negro a suministros de acero antes de que se garantice la plena complementación de los acuerdos ya firmados.

El 18 enero, la ministra de Economía ucraniana, Yulia Sviridenko, afirmó que su país desea extender los límites del pacto alimentario para que también abarque los suministros de acero.

“Antes de discutir la ampliación de los acuerdos del mar Negro a otros productos básicos, como el acero, es necesario asegurar la plena implementación de los ya concertados“, precisó Nebenzia.

En cuanto a las perspectivas de la prorroga, señaló que va a depender de si se logra “un progreso equivalente en la implementación de los dos acuerdos firmados en julio del año pasado en Estambul”.

Mientras se sostiene que las sanciones no afectan los suministros de comestibles y fertilizantes, continuó, empresas extranjeros dudan en realizar negocios con los proveedores rusos por temor a sanciones secundarias.

“Y la Secretaría de la ONU, que se comprometió a resolver estos problemas, no puede lograrlo”, constató el alto diplomático, que se refirió en particular de los fertilizantes que Rusia entregó a África de forma gratuita y que quedaron bloqueados en los puertos europeos desde septiembre pasado.

El 22 de julio, Rusia, Turquía y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) firmaron un acuerdo para desbloquear la exportación de grano y fertilizantes de Ucrania en medio de las hostilidades. Por su parte, los representantes del Gobierno ucraniano suscribieron un documento similar con Ankara y representantes de la ONU.

En el marco de ese acuerdo, conocido también como Iniciativa de los Granos, se instaló en Estambul un Centro Conjunto de Coordinación para garantizar la seguridad de los graneleros que transportan cereales desde Ucrania y realizar las inspecciones pertinentes.

El acuerdo estipulaba también el desbloqueo de las exportaciones rusas de alimentos y abonos, pero Moscú denunció que esa parte del pacto no se cumplía. La ONU aseveró que las restricciones se levantarían.