Ante el incremento de las agresiones verbales, las advertencias y el acoso en contra de las autoridades, electorales, se destinaron recursos adicionales para proteger a quienes se encargarán de gestionar la jornada electoral del 8 de noviembre.
Lo hizo después de que Mark Zuckerberg reconociera que en 2020 recibió una advertencia del FBI que lo llevó a limitar la difusión que tendría en la red social la historia de la laptop de Hunter Biden.